domingo, 18 de agosto de 2013

¿Cómo celebrar el día del niño?

El Día Universal del Niño fue establecido por la Asamblea General de la ONU con la finalidad de llamar la atención de la sociedad sobre las necesidades específicas de este grupo. Diversas instituciones, encabezadas por la UNICEF en cada país, emprenden campañas cada año con actividades artísticas, recreativas y deportivas para recordar la importancia de brindar a los niños y niñas una vida plena en la que se respeten todos sus derechos.

Sin embargo, el objetivo de este día ha sido tergiversado, a tal punto, que ha pasado a ser una mera celebración comercial. Las personas quedan atrapadas en la vorágine de la publicidad y terminan pensando que regalar un juguete es lo más adecuado cada tercer domingo de agosto.

¿Por qué celebrar el día del niño?
Seguramente algunos pensarán que no es necesario celebrar un día a los niños si todos los días son para ellos y son la prioridad número uno de las familias. No obstante, muchísimos niños en el Perú aún viven en condiciones paupérrimas y tienen recortados sus derechos permanentemente. Hay otros más que a pesar de contar con sus necesidades básicas cubiertas no acceden a todas las oportunidades de desarrollo que podrían tener; y todos viven en una sociedad insegura por las altas tasas de criminalidad en el país.

Este día es para recordar que aún debemos mejorar la calidad de vida de todos los niños y niñas. Estos requieren de protección y es responsabilidad de los adultos brindársela. Necesitan el amor y el cariño de una familia que les dedique cuidados y soporte emocional para que puedan alcanzar su máximo potencial. Los niños además tienen derecho a la educación, a participar en actividades culturales, a tener espacios de recreación en los que puedan jugar libremente y sin peligro. Precisan de un ambiente saludable en el que puedan crecer libres de violencia familiar y social; y de un país que les provea las oportunidades de desarrollar y crecer con esperanza y optimismo hacia el futuro.

¿Cómo celebrar el día del niño en familia?

La mejor opción es brindarles toda la atención a sus pequeños durante su día (y ello no quiere decir darles todo lo que pidan); más bien se trata de escucharlos de verdad, acompañarlos y compartir con ellos las actividades que prefieran, aprovechar para conocerlos un poquito más, comprenderlos mejor, brindarles afecto y recordarles lo importantes que son en sus vidas.

domingo, 4 de agosto de 2013

El fastidioso SPM

El síndrome premenstrual (SPM) es la pesadilla de algunas mujeres. Sin embargo, no todas sufren con este como se cree, y menos a toda hora y cualquier día del año, como suelen acusar estereotipadamente muchos hombres. Generalmente se presentan solo algunos síntomas con una intensidad variable. Su aparición se da unos días antes de la menstruación y tiende a desaparecer luego de iniciada esta. Las molestias físicas como dolores de cabeza o de barriga, hinchazón, aumento de peso, cambios en el apetito (antojos por ciertas comidas) o sueño; son algunos de los cambios que pueden aparecer. Los síntomas emocionales como irritabilidad, tristeza, ansiedad y tendencia a llorar también afectan a las mujeres aunque solo interfieren con su vida cotidiana en algunos casos. Para diagnosticar este síndrome es necesario que las molestias se presenten, al menos, en tres ciclos menstruales consecutivos. El tratamiento dependerá de la gravedad de los síntomas por lo que será necesario hacer un registro de estos durante algunos meses, a fin de brindar la información necesaria al especialista. En la mayoría de casos se puede aliviar las molestias físicas y emocionales introduciendo algunos cambios en la dieta y los hábitos cotidianos. El ejercicio regular, la relajación y una nutrición saludable pueden ser de gran ayuda para contrarrestar los fastidios. 

Reus y fiestas: la vida social adolescente

Durante la adolescencia los chicos y las chicas empiezan a interesarse más por las reuniones sociales y las fiestas con los amigos. No es extraño que organicen eventos con sus compañeros de secundaria u otros amigos durante los fines de semana o asistan a los lugares en los que se juntan sus coetáneos.
Pasar el tiempo con el grupo de pares se vuelve indispensable para los jóvenes, ya que este les brinda la posibilidad de identificarse con otros que pasan por los mismos cambios que están experimentando. Los amigos se vuelven el principal punto de soporte emocional para ellos. Con estos descubren el mundo, viven experiencias nuevas y se enfrentan a los problemas que se les presentan. Ello tiene un aspecto positivo, ya que el grupo regula el comportamiento de cada adolescente, en diversos aspectos, mediante la presión grupal. No obstante, esta misma presión ejercida por los compañeros puede llevarlos a incentivar algunas conductas de riesgo como iniciar el consumo de alcohol y otras sustancias.
¿Cómo evitar que ocurra esto en las reuniones o fiestas?
Prevenir es la mejor opción y se debe empezar desde la pubertad. No hay que olvidar que la edad de inicio del consumo de alcohol es cada vez más temprana.
Los padres deben estar alertas y observar el comportamiento de sus hijos, así como la interacción con los compañeros. Las reuniones que sus hijos realicen en casa pueden ser una buena oportunidad para esto. Es importante estar presentes para asegurarse que las cosas no se salgan de control. Si la fiesta es en casa de algún compañero procure hablar con los padres de este para cerciorarse que habrá algún adulto presente y que no se les brinde licor.
Cuando los eventos son en lugares públicos evalúe si sus hijos son lo suficientemente maduros y responsables para asistir. Averigüe la edad de los demás concurrentes. Es probable que vendan licor si es un lugar para todo público y no siempre se respeta la ley que prohíbe la venta a menores.

Si bien no es posible evitar que consuman bebidas alcohólicas en algún momento de sus vidas, la idea es postergar lo más posible el inicio del consumo. Converse de esto con ellos. Hábleles sobre los riesgos y las consecuencias de consumir licor u otras drogas para su crecimiento y desarrollo. Enséñeles a mantener una actitud asertiva para no sucumbir a la presión grupal. Muéstreles con el ejemplo que el alcohol no es indispensable para divertirse y que puede llevarlos a situaciones vergonzosas, a tomar malas decisiones y hacer cosas de las que luego podrían arrepentirse.